La haba es una especie herbácea conocida desde la antigüedad, hablaba de ella ya Plinio el Viejo, originaria del oeste de Asia y de la zona mediterránea.
Sus cualidades nutritivas, el alto contenido proteico, especialmente de la semilla cruda, y su capacidad de crecer incluso en ambientes desagradecidos la han convertido, durante siglos, imprescindible en la nutrición humana. Lástima que hoy en día se utilice sobre todo en las cocinas de las regiones del centro-sur de Italia, en lo que son platos típicos y en su mayoría económicos.
Sin embargo esta legumbre es tan versátil en la cocina, que puede conseguir un excelente puesto en el ranking, sin olvidar que son bajas en calorías pero ricas en fibras dietéticas, sales minerales, vitaminas y contienen mucha agua.
Normalmente las semillas de esta planta se comen frescas, aún inmaduras, acompañadas de rebanadas de pan casero rociadas con excelentes aceites y luego, durante la maduración, se pueden utilizar cocidas.