12 enero 2014

Como se hace la masa para pizza




Italy icon
De niña acompañaba siempre a mi abuela a hacer las compras, que alegría cuando,  entre otras cosas, compraba la levadura y la mozzarella. Era la señal:  ¡¡¡esa noche comeríamos la "PIZZA"!!! Lástima que yo era demasiado chica para interesarme en cómo la preparaba y así, su secreto, se lo llevó con ella.
Creciendo he tratado de hacerla siguiendo diferentes recetas y robándome muchos trucos, sin haber tenido nunca grandes éxitos. Hoy tengo que agradecer a mi amiga Maribel que, con la receta que me dio, logré acercarme suficientemente a la que preparaba mi abuela. Además, gracias a que  lleva muy poca levadura y leuda por muchas horas, es muy ligera y de fácil digestión. 
Con su permiso la comparto con ustedes y les digo sea los ingredientes

Harina 1 kilo; levadura de cerveza 10 gr; agua a temperatura ambiente unos 500 ml; sal fina 20 gr; aceite 60 gr.
Para la elección de la harina les puedo decir que es el ingrediente fundamental para su éxito. Personalmente elijo la harina tipo 1.

y también como prepararla:
En un bol volcamos unos 750 gramos de harina. Tomamos de los  500 ml de agua  menos de un vaso en el cual iremos a disolver la levadura de cerveza. A este punto lo vamos a añadir al recipiente con la harina y además le echaremos el agua restante. Mezclamos bien hasta lograr una masa inicial suave y cremosa, al cual iremos a agregar el resto de la harina, el aceite y la sal ( si es necesario le agregaremos un poco más de agua)  


Una vez que todo esté bien amalgamado, amasamos durante unos minutos sobre la mesa. Para ponerlo luego en un recipiente apenas enharinado que taparemos con film transparente  
y un paño por encima para que empiece a levar durante una hora aproximadamente Mi abuela lo tapaba con una cobija, costumbre que aún hoy guardo.
A la hora de elegir los recipientes, tengan siempre en cuenta que el volumen de la masa se duplicará a medida que leude.
Pasado este tiempo, iremos a dividir la masa en 3 partes iguales. Trabajamos cada bollo replegándolo hacia la parte central, lo giramos y moviéndolo sobre la mesada le daremos nuevamente la forma redonda antes de colocarlos por separado en otros recipientes, apenas enharinados. Cubrimos cada uno con el film trasparente y un paño, dejando leudar durante unas 5 horas.

Una variante que me enseñó Maribel es preparar la pizza la noche anterior. Siguiendo el procedimiento inicial  de la misma manera , con la diferencia de que una vez divididos en tres panes no los dejo levar, sino que llevo los recipientes en la heladera. Por la mañana las saco de la heladera, espero una media hora, vuelvo a trabajar cada masa y luego las dejo tapadas a temperatura ambiente durante unas 2-3 horas.

Sea cual sea el 
método de preparación, ¡la masa finalmente está lista! Si eres capaz de hacer que la masa gire en el aire, ¡suerte! Yo personalmente uso el palo de amasar y las manos tratando de darle un espesor lo más parejo posible.
La forma a veces es rectangular, a veces es redonda, a veces es cuadrada, todo depende del molde que usaré. 
Lo único importante es que se utilice la bandeja recogegotas del horno o bandejas finas aptas para cocinar pizzas.

          







Rociamos las bandejas con aceite y colocamos las pizzas, cubrimos con tomate ( mi abuela, al hacer esto, presionaba ligeramente con las manos sobre la masa, para que el tomate penetrara mejor.
Este es un recuerdo que tengo muy imprimido en mi memoria).
Rociamos la superficie con aceite de oliva y llevamos al horno, que habremos precalentado a 220°, y dejamos cocinar durante unos 25-30 minutos.
Los tiempos de cocción también varían según los hornos, pero un secreto muy sencillo es comprobar el color de la parte inferior de la pizza.  
Unos minutos antes de terminar la cocción, iremos a condimentar nuestra pizza con mozzarella y con cada ingrediente que más nos guste, la elección es infinita. ¡¡¡ La única obligación es comer la pizza bien caliente, apenas salida del horno!!!

Un paréntesis: si por casualidad queremos hacer una pizza blanca, sin tomate, será suficiente rociar la superficie de la masa con aceite y luego llevarla al horno. El mismo procedimiento se aplica a la focaccia, cuya receta veremos en otro momento.
Volviendo a nuestra pizza blanca, aquí también se aplica el mismo principio: debe ser condimentada al gusto y fantasia.
 
     

Con esta masa podremos preparar pizzetas fritas; focaccia; pizzas a forma de estrella con queso, panceta, salame y salsa barbacoa; o también podemos rellenarla con salmón ahumado, rúcula y queso parmesano; o darle una forma de rosca y rellenarla; o hacer una simple pizza rellena con escarola y.......
BUON APPETITO!!!!!!!!

1 comentario:

  1. Adriii holaaaa!!! me siento honorada que me nombras en tu blog!!! jajaaaa..., lo explicastes perfecto! como dicen por aqui ... mejor que asì se muere!!! jajaaa.... la masa tambien se puede hacer el mismo dìa ,lo importante es dejarla bastante tiempo levitar, siendo el mismo dìa sin meterla en la nevera (heladera). Esto es porque màs tiempo se deja levitar menos pesada ès, màs digerible... un beso Adrii...

    ResponderBorrar